Cómo aceptar lo que no podemos cambiar

Cuántos de ustedes han escuchado la oración de la serenidad, aquella que dice: «Dios, concédeme serenidad para aceptar las cosas que no puedo cambiar, coraje para cambiar las cosas que puedo y sabiduría para conocer la diferencia».

Algo que hace de la vida una experiencia fascinante y, a la vez, un desafío, es el hecho de que todo está en permanente cambio. Incluso si es imperceptible, constantemente experimentamos pequeños (o grandes) cambios en nuestro cuerpo, emociones, pensamientos, relaciones, espacio físico, medio ambiente, trabajo… etc. En algunas ocasiones, hemos buscado de forma consciente algunos de estos cambios y, en otras, los cambios son impuestos.

La pregunta que surge, entonces, es ¿cómo podemos hacer frente a circunstancias que nunca hubiésemos elegido ni deseado? ¿Cómo podemos aceptar lo que no podemos cambiar? Este tipo de aceptación puede ser un desafío emocional, sí, pero es posible transitarlo. Estas son algunas sugerencias que puedes tener en cuenta para asumir esta tarea:

1. Reconocer lo que no se puede cambiar.

Como dice la oración, el primer paso para aceptar lo que no podemos cambiar es reconocer qué parte de nuestra experiencia está fuera de nuestro control. A grandes rasgos, existen 4 cosas que no podemos cambiar:

El pasado: aunque el pasado haya dejado una huella en tu experiencia emocional o incluso en tu cuerpo, el evento pasado ya no existe.

Otras personas: puedes inspirarlas o intentar influir en ellas, pero no puedes controlar lo que piensan, sienten o hacen…

Eventos de la naturaleza como: terremotos, tormentas, ciertos tipos de enfermedades, derrumbes, etc. que siguen sus propias leyes… y, por supuesto, la muerte.

Eventos sociales: aunque nuestras pequeñas acciones pueden participar en la definición de una u otra circunstancia, se trata de pequeños granos de arena en la inmensa playa de los acontecimientos sociales.

Así que el primer paso es aceptar que no tienes control sobre estos 4 aspectos de tu experiencia.

2. Hacer el duelo por lo que no puedes cambiar.

La aceptación de las experiencias que están fuera de nuestro control necesitan tiempo y espacio para ser procesadas emocionalmente. Permítete sentir la pérdida de lo que tenías y ya no está; de aquello que esperabas y no sucederá. Como en todo proceso de duelo, el sufrimiento puede ir y venir durante un tiempo. De hecho, puede que necesites llorar. Es necesario conectar con tu experiencia emocional para, posteriormente, dejarlo ir.

3. Hazlo significativo

La aceptación de la puerta que se cierra resulta más fácil cuando exploramos qué otras puertas podemos abrir (o ya están abiertas, pero no éramos conscientes de ello). Pregúntate ¿qué puedo aprender de mi dificultad? ¿De qué manera esta experiencia me hace más fuerte, flexible, creativo(a), compasivo(a)…? Indaga qué oportunidades y posibilidades surgen a partir de esta experiencia.

4. Oriéntate hacia lo sí puedes cambiar

En lugar de quedarte atrapado(a) en lo que pudo ser y no fue, ten presente tu propósito en la vida o construye uno nuevo. Investiga acerca de personas que han pasado por circunstancias similares a la tuya o por otras igualmente complejas. Aprende e inspírate a través de su experiencia. Busca apoyo en tu familia, amigos, personas en quienes confías o en profesionales. Pon en marcha todos tus recursos para retomar las riendas de tu vida.

 

Fuentes:

HOW TO ACCEPT THE THINGS YOU CANNOT CHANGE

5 claves para aceptar lo que no puedes cambiar

Cuando comienzas a aceptar cosas que no puedes controlar en la vida, estas 10 cosas increíbles sucederán

Obtenga la fuerza para aceptar las cosas que no puede cambiar

El poder de la aceptación: deja de resistirte y encuentra la lección

 

Un comentario en “Cómo aceptar lo que no podemos cambiar

  1. Gracias , me resulto muy interesante y útil el artículo , de hecho se lo voy a compartir a mis hijos

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.